Álvaro Romillo, empresario que dio 100.000 euros a Alvise para presuntamente financiar su campaña electoral para el parlamento europeo, prefiere no defenderse todavía a pesar de las acusaciones de chiringuito financiero que circulan sobre su empresa, 'Cryptospain'.
"Ya me gustaría haber declarado y estar en la Audiencia Nacional. Esta es una trama mucho más grande de la que os imagináis y tiene un único objetivo", afirma el empresario en 'El Periódico de España'.
Mientras, Alvise, líder de 'Se Acabó la Fiesta', argumenta que el dinero que el empresario le dio era para un trabajo que realizó de forma privada: "Fue de promoción y para asesoría. Los mensajes no son toda la conversación".
En esos mensajes y audios, el agitador de ultraderecha invita a Romillo a dar charlas gratuitas en el parlamento europeo, que estarían financiadas con "fondos de Comisión".
Además, también le ofreció leyes que favorecieran a su empresa en caso de ser él la llave de un hipotético Gobierno de coalición entre Feijóo y Abascal: "Puedo poner 'sine qua non' una serie de legislación relativas a 'bitcoins".