Tres hoteles de Palma están autorizados para recibir turistas a partir del lunes en el marco del plan piloto que traerá visitantes alemanes a Mallorca. Así empieza el ensayo general de una temporada turística que estará marcada por las medidas de seguridad como explica Sergio Navarro, director del Hotel Riu Concordia Playa de Palma: "La distancia de seguridad y el gel las mascarillas y los guantes estarán por todas las zonas".
Y es que cada silla, mesa, pasamanos o balcón se limpia y desinfecta con empeño. Incluso, una cámara medirá la temperatura de los clientes y avisará cuando no llevan mascarilla, obligatoria en la recepción y en los espacios comunes del hotel. "Hemos colocado las mamparas en cada uno de puertos de los recepcionistas", detalla Daniel Molina, recepcionista.
Unas estrictas medidas que van del comedor a la piscina, donde el aforo se reduce a 20 bañistas y la toalla será obligatoria en las hamacas, que estarán separadas por dos metros de distancia. Por su parte, el Gobierno balear dice que el sector está preparado. "Todos los protocolos están cerrados", explica Francina Armengol, que detalla que tienen "la formación y los requisitos adecuados dentro de las empresas turísticas".
Puesta a punto, también, del sector de la restauración, donde se muestran optimistas ante la llegada de miles de alemanes. Pero no todos los alemanes que aterricen el lunes en Mallorca serán turistas. Uno de los tres turoperadores que participa en el plan piloto mandará antes a sus profesionales para comprobar las medidas de seguridad en el aeropuerto y los hoteles.
Otro ha contratado una empresa externa para verificarlas y sus clientes no llegarán hasta al menos el 22 de junio, una vez concluya el Estado de Alarma.
Solo un turoperador manda ya turistas la semana que viene. El lunes llegarán a Palma dos aviones con 400 pasajeros procedentes de Düsseldorf y Frankfurt mientras que el jueves llegarán dos más desde Hannover y Stuttgart.