Acompañado por varios consejeros de su Gobierno y en un formato inusual, ante la Diputación Permanente del Parlamento vasco, el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha comparecido para explicar su gestión tras el derrumbe del vertedero de Zaldibar (Bizkaia) y ha lamentado los "errores" que ha podido cometer su Gobierno.
Ha admitido que "a la vista de las consecuencias, cabe afirmar que los mecanismos de control no han sido suficientes" para prevenir el derrumbe: "Soy plenamente consciente de las consecuencias de estos hechos. Se han producido errores, también actuaciones mejorables en la forma, inherentes a una circunstancia inédita en su dimensión, complejidad técnica y a la necesidad de intervenir con urgencia.
Ha dicho no tener "ningún problema en asumir las críticas, lo he hecho siempre que me ha parecido necesario", ha asegurado. Y ha asegurado que comprende la preocupación de la ciudadanía del entorno y en especial la de las familias de los desaparecidos tras el colapso de este vertedero, el pasado 6 de febrero.
El lehendakari ha sostenido que se trata de un suceso "excepcional" y que la actuación de la Administración pública tiene en todo caso carácter subsidiario, porque la responsable del vertedero es la empresa Verter Recycling SL: "La Justicia decidirá, nuestra responsabilidad es que lo haga contando con todos los elementos de juicio",.
El lehendakari describe la situación como "inédita, de máxima complejidad, extraordinaria y totalmente impredecible".
Ha dejado claro que siempre ha actuado con "voluntad e intención de ayudar y coordinar" y ha reconocido que "siente mucho los errores" que haya podido cometer su Gobierno ante una situación "inédita, de máxima complejidad, extraordinaria, inusual, totalmente impredecible y con singularidades únicas".
Ha recordado que el Departamento vasco de Medio Ambiente está llevando a cabo una auditoría completa que permita "aclarar los extremos, exigir responsabilidades y mejorar los protocolos de actuación" y ha reiterado su compromiso "con la absoluta transparencia y el ejercicio de la responsabilidad".
"No tengo ningún problema en asumir las críticas", asegura Urkullu, que ha criticido "los deseos vindicativos por debilitar al adversario político".
Ante esta "tragedia" ha insistido en que hay dos alternativas: "División o unión". "Se pueden agitar los miedos, los deseos vindicativos o la prisa por debilitar al adversario político si es que esta es una cuestión de utilización política. Se puede, lo estamos comprobando", ha censurado.
El lehendakari ha aprovechado su primera intervención para hacer un repaso de todas las actuaciones emprendidas desde el 6 de febrero, día en el que se constituyó una mesa de crisis, y desde el que se mantuvo "comunicación permanente" con las familias de los desaparecidos, a las que se les ha dado desde el primer momento "información veraz, completa y realista", ha dicho
"La prioridad son las personas. El rescate de las personas desaparecidas, la seguridad de todas las personas profesionales que han trabajado y trabajan en la zona, y la garantía de seguridad de los vecinos", ha insistido.
Extinguido el incendio
Los equipos de extinción han conseguido este martes apagar los frentes del incendio en el vertedero, donde a lo largo del día desaparecerán por completo los focos humeantes, aunque un retén permanecerá en la zona para evitar que el fuego pueda reproducirse.
El director general de la Agencia Vasca del Agua (URA), Ernesto Martínez Cabredo, ha informado de que los frentes más importantes del incendio quedaron "vencidos" anoche, y que a lo largo del día de hoy desaparecerá el humo en la zona, pero ha advertido de que los rescoldos y las brasas podrían reproducir el fuego.
La extinción del incendio, que había provocado niveles de furanos y dioxinas que podrían ser nocivos en los municipios próximos de la comarca (Zaldibar, Ermua y Eibar, que suman 46.000 habitantes), facilitará las tareas de búsqueda de los dos trabajadores desaparecidos.