El lehendakari convoca las elecciones autonómicas en el País Vasco el próximo 12 de julio. Tras celebrar un Consejo Extraordinario, Iñigo Urkullu ha anunciado esta nueva cita con las urnas que, como suele ser habitual, coincide con las elecciones gallegas. Ambos líderes autonómicos suspendieron las elecciones, en un principio convocadas el pasado 5 de abril, debido a la pandemia de coronavirus.
El pasado jueves, 14 de mayo, tanto Urkullu como el presidente gallego, Alberto Núñez Feijoó, comunicaron a las fuerzas políticas de ambas regionessu intención de convocar los comicios a principios de verano, considerando que, según los criterios epidemiológicos, el próximo otoño puede haber un rebrote de COVID-19.
"Quedan 54 días hasta el 12 de julio, casi dos meses, por lo que para entonces si se cumplen todas las previsiones el conjunto del Estado habremos superado la cuarta fase del Plan de Transición a la Nueva Normalidad", ha explicado. "He cumplido al 100% con los acuerdos con los partidos políticos, cuatro formaciones políticas están de acuerdo en que las elecciones se celebren cuanto antes en favor de las condiciones sanitarias y otras dos formaciones políticas no plantean si quiera las elecciones en septiembre", ha argumentado. Por eso, ha dicho el lehendakari, tiene "obligación legal de convocar las elecciones".
"Prefiero aprovechar las dos opciones que tengo antes que esperar sin más a después de verano y que en septiembre se asista a un rebrote", ha insistido.
Urkullu ya había manifestado su intención de celebrar las elecciones antes de agosto.
El lehendakari apuntó hace unos días que es momento de "valorar" que las autonómicas tengan lugar en julio, según el portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, "si la evolución de la pandemia sufriese un retroceso" y fuera necesario volver a aplazarlas, aún quedaría "la opción alternativa de septiembre-octubre".
Una posición similar adoptó el líder gallego, que trasladó a los partidos que tomará la decisión más responsable según los datos de la pandemia que se conocen, insistiendo en que su Gobierno sigue teniendo como prioridad la lucha contra la crisis sanitaria y la reactivación social, laboral y económica.