El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha calificado de "desconcertante" el pacto del Gobierno con EH Bildu para aprobar la prórroga del estado de alarma.
Durante su comparecencia en la reunión semanal de los presidentes autonómicos con Pedro Sánchez, Urkullu ha instado a la coordinación y cooperación entre Ejecutivo y Comunidades Autónomas, mostrando su confianza en contar con recursos suficientes como para arrancar la nueva normalidad.
Antes de dicho encuentro, en una entrevista publicada en El Correo y Diario Vasco, Urkullu ha opinado que es "absolutamente peligroso" hablar de derogar "de manera integral la reforma laboral incluso estando vigente el estado de alarma" y ha lamentado que el Gobierno ofrezca "una sensación de desconcierto absoluto" y se arriesgue "a quebrar la confianza en la interlocución a nivel político, en los mercados internacionales y la Unión Europea".
A su entender, ese pacto de EH Bildu con el Gobierno llega después de que la coalición abertzale se reivindicara tras las elecciones generales como una formación de Estado y ha advertido de que igual ese posicionamiento se enmarca "dentro de una operación de más largo alcance".
Ante las elecciones del 12-J: "Vienen años duros"
Ha afirmado que el Gobierno español ha atendido algunas de sus propuestas para definir la desescalada, "pero aún no existe una codecisión" y ha pedido disculpas a los ciudadanos "por el desconcierto que genera".
Ha indicado que la decisión de que Euskadi pasara a la fase 1 fue "por méritos propios" y no por el apoyo del PNV a Pedro Sánchez. "Estamos hablando de condiciones sanitarias. Nadie puede ser tan malpensado de creer que eso está al albur de negociaciones políticas", ha dicho.
Sobre las próximas elecciones vascas del 12 de julio, Urkullu ha avisado de que "vienen años duros", por lo que cree que "sería aconsejable que el nuevo Gobierno Vasco tuviera mayoría absoluta", al tiempo que ha abogado por reeditar el pacto entre el PNV y PSE-EE.
El lehendakari ha afirmado que "no es comprensible" que la Comisión Europea vaya a abrir una investigación sobre el desprendimiento del vertedero de Zaldibar, que sepultó a dos de sus trabajadores que continúan desaparecidos, sin haber consultado al Gobierno Vasco y así lo ha transmitido en una carta a Bruselas en la que, además, la administración vasca, ofrece "total colaboración".