Los jóvenes son la pieza clave para la ansiada inmunización de grupo. De los cerca de 27 millones de personas que tienen la pauta completa en España, solo un 12,1% tienen entre 12 y 19 años. Aun así, su vacunación avanza, mientras que casi la mitad de los veinteañeros (47%) ya goza de las dos dosis.
La cuestión es que la variante delta ha removido todos los pronósticos. Desde que el pasado mes de abril el presidente del Gobierno abriera la veda para hablar de la inmunización de rebaño, en la mente de todos ha estado una fecha que se ha repetido como un mantra: el mes de agosto. Pero ahora ya no basta con el 70%, sino que los expertos ya hablan de un 85% o incluso más.
Y ya es agosto, con unas previsiones que se cumplirán, puesto que, efectivamente, la vacunación alcanzará al 70% de la población este mes, sobre todo gracias a un nuevo empujón en las dosis de Pfizer, que aumentan en 3,4 millones de cara a las próximas semanas. Ahora bien, estas deben —y serán— destinadas a los más jóvenes, debido a que la campaña no deja otro margen.
Para hacerse una idea, basta con mirar los números. El 70% de población vacunada de la que hablaba Pedro Sánchez se sitúa en los 33 millones de personas. De estas, 26.933.847 tienen la pauta completa. Es decir, faltan cerca de 6 millones de inmunizaciones para alcanzar este primer objetivo, algo que se refleja cuando atendemos a quién ha recibido la vacuna y quién no. Solo con terminar de vacunar a los que tienen entre 12 y 19, el cupo estaría muy cerca de completarse.
Con las cifras actuales, a día de hoy (a falta de la actualización de los datos del fin de semana) faltan 3,78 millones de adolescentes por inmunizar, mientras que, en el caso de los veinteañeros, la cifra asciende a los 4,1 millones. Es decir, si se consiguiera vacunar mañana a la población de entre 12 y 23 años, por ejemplo, España ya estaría alcanzando el 70% de inmunidad. Algo que, como es lógico, no va a ocurrir en cuestión de un día, pero para el que las CCAA ya están aumentando sus esfuerzos.
Todo ello sin olvidar que esta quinta ola ha tocado techo y, pese a la gravedad de algunos datos, especialmente de incidencia, ha dejado consigo un resultado muy diferente al de los meses de enero y febrero. La población más mayor está protegida, aunque ello no quiere decir que no puedan contraer la enfermedad y, además, transmitirla. Pero tener al 87,8% de la población mayor de 40 años con la pauta completa dibuja otro panorama de cara a la vuelta a la normalidad.
Al menos 7 comunidades vacunan a toda la población diana
Como ha ocurrido hasta ahora, los gobiernos autonómicos han seguido una estrategia asimétrica a la hora de priorizar grupos en su vacunación. Algunas, como Madrid o Cataluña, abogaron por ampliar la vacunación a buena parte de su población diana hace semanas. Pero otras, como la Comunidad Valenciana, han querido completar su inmunización sin solapar grupos.
A día de hoy, el avance de la variante delta, así como la evolución de la propia inmunización, ha llevado a todas y cada una de las regiones españolas a empezar la inmunización de los mayores de 20 años. No obstante, algunas amplían más la edad que otras, como ocurre en Andalucía, Aragón, Baleares o Murcia, entre otras. Además, en el caso de esta última, el grupo se ha extendido este mismo lunes.
En la región andaluza, los menores de 12 a 16 años pueden pedir cita para vacunarse con Pfizer y Moderna. Aragón lo hace entre los que tienen de 12 a 15 años, mientras avanzan en su inmunización con Janssen, razón por la que se han habilitado hasta 4.000 dosis para mayores de 40. Un hecho que supone un acelerón, debido a que, mediante esta inyección, cada pinchazo se traduce en una nueva persona inmunizada.
En Asturias los menores de 16 también pueden pedir cita, pero a través de sus padres o tutores. En Baleares la vacunación también se produce entre los que tienen de 12 a 15 años, a la que además se suma un nuevo grupo: las embarazadas, que hasta ahora podían vacunarse de acuerdo con el orden establecido en la estrategia de Sanidad, pero que en el archipiélago ya se ha habilitado para todas las edades.
En Canarias esta vacunación no es simétrica: en algunas islas es a partir de los 12 y en otras a partir de los 14. Cantabria, como ha hecho la Comunidad Valenciana, se ha centrado en los veinteañeros, como también hace Castilla y León y, de cerca, Castilla-La Mancha. En este último caso los mayores de 18 ya pueden recibir su pinchazo.
Cataluña y Extremadura establecen su límite en 15 y 16 años, respectivamente, mientras Galicia tiene entre sus planes volver a vacunar a los mayores de 16 tras un parón por falta de vacunas. Este ha sido el mismo caso que en Madrid, que en las últimas semanas ha tenido dificultades para completar pautas completas en fecha (en el caso de Pfizer, a los 21 días). Junto con eso, La Rioja amplía su vacunación a mayores de 19, a la par que se incide en completar la pauta a los que sobrepasan los 30.
Toda la maquinaria de la Salud Pública está en marcha para avanzar entre estos grupos, debido a que el avance de casos se debe, casi en su totalidad, a que la enfermedad se ha extendido este verano entre los que no habían tenido la oportunidad de protegerse. Un cambio de tendencia que retrasaría la ansiada inmunidad de grupo, pero que, con el avance de la edad, acerca a las CCAA y Ejecutivo hacia sus objetivos. Todo ello, para evitar el récord en negativo de nuestro país, que ha protagonizado una ola de coronavirus más que muchos de sus vecinos europeos.