Los vecinos del barrio madrileño de Malasaña estaban llamados a hacer unas fiestas populares del 2 de mayo desde los balcones, en las que, como es costumbre, habría música y Vermú, aunque no se celebraría en la calle, debido al estado de alarma que hay en España por el coronavirus.
Sin embargo, algunos vecinos decidieron que la fiesta en los balcones ya ha sido durante el confinamiento y que harían la fiesta en la calle "con distanciamiento social".
Las imágenes que se ven en el vídeo llaman la atención y reflejan el comportamiento incívico y poco responsable de algunos vecinos de este barrio del centro de Madrid, que ponen en riesgo la salud de sus familiares y las personas que conviven con ellos saliendo a la calle a beber y bailar. Son aglomeraciones y actitudes no están permitidas, ya que la normativa sí deja pasear o hacer deporte en las franjas permitidas, pero no detenerse ni formar corrillos cerca de otros vecinos.
Este domingo, con una imagen más tranquila en ese mismo barrio, había quien mostraban su descontento por lo que ocurrió en la noche del sábado: "Me parece una irresponsabilidad lo que vi en esta zona", dice una vecina del barrio madrileño de Malasaña.
Aglomeraciones también en el paseo de la Barceloneta
También el paseo de la Barceloneta se llenó este sábado de gente que salió a pasear y hacer deporte durante la franja establecida. Sin embargo, entre toda esa gente había quien, de nuevo, se saltaba las normas. Y es que es cierto que se puede parar para estirar, perro no para sentarse tranquilamente frente al mar y pasar las horas tomando el sol.
Por imágenes de aglomeraciones como las que se ven en este vídeo, la Asociación de Vecinos de la Barceloneta ha pedido que se aumenten las medidas de control en la zona y la Plataforma en Defensa de la Barceloneta ha ido incluso más allá: han exigido su cierre para evitar, dicen, un posible repunte de la pandemia. Aseguran que, tras llevar semanas confinados, ahora se sienten invadidos por lo que han llamado "un ejército de falsos corredores" que ponen en riesgo la zona saltándose los mínimos de distanciamiento.
Profesionales sanitarios, críticos con los comportamientos incívicos
La doctora Raquel Rodríguez Merlo, médico del SUMMA, ha destacado en laSexta Noche que "es muy importante que la conciencia social esté a la orden del día". "Las imágenes que estamos viendo nos van a llevar a que haya una serie de casos y la Sanidad todavía no está preparada para ese posible repunte. Tenemos que dar más margen para que los hospitales y los médicos se repongan, porque hay muchos sanitarios de baja", ha afirmado.
Por su parte, César Carballo, médico adjunto de Urgencias del Hospital Ramón y Cajal, ha reclamado "un poco de cabeza" porque "la tasa de mortalidad de este virus en pacientes mayores de 70 años es uno de cada cuatro, veinte veces más alta que la gripe en determinadas pirámides de población".
"Hemos visto auténticas tragedias de familias que han perdido a su madre y a su padre en la misma semana. Parece que hemos olvidado esto, que el virus no atiende a sexo, a raza, a religión o a que llevemos 40 días metidos en casa. Hay que pensar en lo que hemos pasado, en que hace poco salían noticias de cuerpos apilados en pistas de hielo, porque parece que la gente se ha olvidado, pero el virus sigue ahí y la amenaza no se va a ir", ha expresado.
Gabriel Rubio, jefe de Psiquiatría del Hospital 12 de Octubre, también se ha pronunciado sobre las imágenes de gente celebrando las fiestas del 2 de mayo en Malasaña, afirmado que "hace falta más pedagogía, más sanciones administrativas". "Si la Policía han estado denunciado situaciones de personas que han salido, por qué no se va a denunciar esto. La gente que lo está haciendo bien vería correcto que las personas incívicas fueran sancionadas", ha asegurado.
Por último, Eduardo Díaz, médico de Atención Primaria, ha apuntado que "la gente tiene muchas ganas de salir a la calle, de celebrar" y que aunque se tiene la certeza de que la situación está siendo horrible, "también es cierto de que el 95% de la población ha estado confinada en su casa, haciéndose sus vídeos y sus selfies y nada más y están deseando este tipo de cosas", añadiendo que está de acuerdo con Gabriel Rubio en que "las normas están para cumplirse".