El presidente Valenciano Ximo Puig avisa a Montoro: "Están jugando con fuego". Califica de chantaje que vincule los 105.000 millones comprometidos para 2018 a la aprobación del Presupuesto. "Es un enorme despropósito", asegura.
Una crítica a la que se añaden la mayor parte de la Comunidades Autónomas, que también alzan la voz contra el ministro de Hacienda. Desde el Partido Popular salen al recate del ministro de Montoro y niegan que se trate de un chantaje. "¿De dónde vamos a sacar el dinero para la dotación presupuestaria? De los Presupuestos, así que no hay chantaje", ha afirmado Rafael Hernando, portavoz del PP en el Congreso.
Con las cuentas congeladas, Cataluña dejará de percibir 780 millones de euros, Comunidad Valenciana 352, Murcia 127 y las Islas Baleares 67.
Los expertos advierten de que las autonomías realizan una porción de gasto muy superior a los ingresos que reciben.
Para 2017, el objetivo de déficit fue del 0,6%, pero para 2018 Montoro quiso reducirlo a la mitad y finalmente lo ha dejado en el 0,4%. No obstante, significa un esfuerzo enorme para las autonomías, que deberán recortar su déficit un 33%.
Con menos ingresos, las autonomías, de las que dependen Sanidad y Educación, lo pasarán todavía peor para cumplir el déficit.