Cientos de mujeres se han manifestado en más de 250 ciudades españolas para pedir que se decrete la emergencia feminista. Condenan las terribles cifras del machismo: desde que hay registros 1.017 mujeres han sido asesinadas.
Este año los datos nos llevan nueve atrás, "al año 2011 para llegar a un número semejante de víctimas, 42 este año", según recordaba Yolanda Besteriro, presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas.
El verano ha sido trágico. Solo en el mes de julio 13 mujeres fueron asesinadas por sus parejas o exparejas. Esta semana en solo 48 horas han matado a cuatro. La última el miércoles en Madrid, una mujer de 31 años asesinada a puñaladas. "Esto tiene que terminar ya", resume una manifestante.
Por eso, los colectivos feministas piden que se avance en las medidas de prevención y que las instituciones cumplan. Asimismo, denuncian pérdidas de derechos con los últimos cambios políticos. "Vemos la estrategia de grupos de ultraderecha de un clarísimo negacionismo de que este problema exista y pueda tener un nombre", explica Ana de Blas, de la Asamblea Abolicionista de Madrid.
Este mismo lunes un hombre mató a tiros a tres mujeres en Valga (Pontevedra). Lo hizo delante de sus hijos de cuatro y 7 años. Con ellos son 32 los niños huérfanos en lo que va de año. "La Administración no está respondiendo a las necesidades ni está actuando con la diligencia que se les presupone a las Administraciones públicas", indica otra manifestante.
Una cifra que se une a las 160.000 denuncias por malos tratos que se pusieron en 2018 y a otro dato terrible: en España cada hora hay una denuncia por violencia sexual.
"Se avanza muy despacio pero se retrocede muy deprisa", advierte Ana María Pérez, presidenta de la Federación de mujeres separadas y divorciadas, "todos los indicadores son de retroceso". Y el feminismo no va a dar ni un paso atrás.