Los agentes le exigieron que saliese del coche y soltase la espada samurái que llevaba en su mano. Pero lejos de obedecer, el hombre respondió de forma violenta y empuñando el arma caminó hacia los agentes, como se puede ver en el vídeo de portada.
El policía acabó disparándole hasta vaciar el cargador. El hombre tenía una enfermedad mental.

Gracias a "la presión policial ejercida"
Liberados y a salvo la mujer y el joven secuestrados en una villa de lujo en El Salobre (Gran Canaria)
Los detalles Las fuerzas de seguridad consideran que sus captores los han puesto en libertad gracias a "la presión policial ejercida" desde que se conoció el caso.