Se ha desmatriculado del centro por miedo

Agresión ultra a un menor tras denunciar la excursión de su instituto al Valle de los Caídos

Exaltación franquista En el trayecto al lugar, varios jóvenes realizaron proclamas e incluso cantaron el 'Cara al Sol' para compartirlo luego en redes sociales.

Joven agredido en Palencia

Agresión salvaje la que ha sufrido Víctor, un joven estudiante del centro privado de Formación Profesional La Salle Managua, en Palencia, por parte de otros dos alumnos que se reconocen como de extrema derecha. Todo, por la denuncia del adolescente por exaltación franquista durante una excursión de su instituto al Valle de Cuelgamuros.

Eso le ha valido llevarse una paliza. Llevarse golpes en el estómago, patadas en la espalda y hasta amenazas con un cúter, como él mismo cuenta: "Se me puso un cúter en la espalda. Se me agarró por el cuello y se me dijo, '¿y ahora qué?"

"Hay gente que paga por información mía"

Y es que su denuncia le ha puesto en el foco: "Hay gente que está pagando. Que está ofreciendo dinero tan solo para conseguir información mía".

"Ambos tienen antecedentes en el centro por exhibición franquista. A uno de ellos le han requisado allí varias banderas franquistas", expone Víctor sobre los alumnos que le propinaron la brutal paliza.

Silencio en la Consejería de Educación

La causa de todo esto, su denuncia. Su denuncia por la exaltación franquista durante una excursión. Una de la que presumían incluso en redes sociales y que ha llegado a apoyar incluso la Falange. Con la Consejería de Educación de Castilla y León guardando silencio y negando que los profesores presenciasen la agresión, el centro ha abierto una investigación para ver qué ha pasado.

Mientras, las asociaciones de memoria histórica consideran muy peligroso el desarrollo de este tipo de excursiones. "El sistema educativo no puede permanecer al margen de la exaltación del fascismo", cuenta Iván, de la Asociación Recuerdo y Dignidad.

El joven se ha desmatriculado del centro

Víctor, por su parte, se ha desmatriculado del centro en el que estudiaba por miedo a represalias. El joven, de 16 años, asegura que varios grupos ultras, de diferentes puntos de la comunidad, le están amenazando. "Gente que ha llevado a otros a la UCI o a fallecer por las palizas", afirma.

Es, de nuevo, una muestra más de que 50 años después de la muerte del dictador Franco esos mensajes de odio siguen dejando graves consecuencias entre los más jóvenes.