Ocho agentes de la Guardia Urbana de Lleida han sido puestos en aislamiento a la espera de que las pruebas PCR confirmen o descarten la infección por coronavirustras participar en la detención de un hombre infectado, según ha informado el Ayuntamiento de Lleida.
Seis de estos policías actuaron el pasado lunes en una pelea en un bar en el barrio de La Mariola. Allí, mantuvieron contacto físico con uno de los agresores, infectado con COVID-19, que puso resistencia y les escupió.
Además, otros dos agentes que participaron en el dispositivo tuvieron que acompañar al detenido en su traslado al Hospital Universitario Arnau Vilanova de Lleida, manteniendo más contacto con él.
Fue en el centro hospitalario donde los sanitarios alertaron de que el detenido era positivo en coronavirus y, por ello, los agentes lo llevaron hasta su domicilio y le advirtieron de la obligatoriedad de mantenerse aislado hasta que el Departamento de Salud confirme que es negativo.
Tras lo ocurrido, se han abierto diligencias por atentado a los agentes de la autoridad, por delito de lesiones y contra la salud pública.
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