Hasta 426.000 casos pendientes tenían en los tribunales de lo social a finales de 2023. Muchos, muchísimos. Tantos que son, de hecho, un 16% más que en el año anterior. Todo al final pasa factura a unas personas afectadas tras realizar denuncias a sus empresas y que incluso prefieren no dar la cara por miedo a posibles represalias.
"Me faltan al respeto, me hacen una serie de prácticas injustificables... Se han negado a pagarme una parte de mi sueldo sin un motivo objetivo", cuenta un trabajador que sigue trabajando para la empresa a la que denunció y que ahora mismo está de baja.
Lo peor se lo espera para cuando vuelva: "Sigo de baja, pero me tendré que reincorporar en algún momento a un lugar en el que sé que no me quieren y en el que ellos saben que he denunciado. Si el ambiente era malo, ahora será peor".
La fecha del juicio, todavía muy lejana: "Me lo han dado para el 25 de octubre de 2025. La espera se vive mal".
Más Noticias
- El duro testimonio del padre de Samuel Luiz: "Lo que hicieron con mi hijo fue odio, ni a un perro se le deja tirado en una cuneta"
- Detienen a tres personas y liberan a nueve mujeres víctimas de explotación sexual en Lleida
- Detienen en Gijón a un violento agresor sexual reincidente relacionado con dos agresiones sexuales
- Muere un hombre de 63 años en Guadalix de la Sierra (Madrid) tras supuestamente ser corneado por una vaca
- La clínica de San Fernando (Cádiz) donde llevar a los animales era un auténtico infierno: denuncian la mala praxis del centro
Y es que cuanto más tiempo pasa más complicado es llegar a un acuerdo, como explica César Ponce, abogado, socio director y fundador de ponce.law: "El trabajador está dispuesto a negociar con la empresa cuando hay una decisión rápida".
Pueblo Ejemplar 2024
Leonor defiende 'lo rural' en la visita de la Familia Real a Sotres: "Sois un ejemplo para cuidar las tradiciones y para innovar"
La hija mayor de los reyes ha puesto en valor el papel fundamental de los pueblos en España destacando a las personas que se quedaron en los tiempos difíciles para mantener vivas las aldeas de nuestro país.