Julio ha sido el mes con más víctimas mortales en las carreteras españolas en los últimos cinco años, 124. Para encontrar un mes de julio tan trágico hay que remontarse a 2011, aunque ya el pasado año repuntó el número de víctimas tras años de descensos.
"Hay carreteras que tienen un déficit de conservación y mantenimiento muy importante, que hace que un desplazamiento de largo recorrido sea un poco más peligroso que en los últimos años", ha asegurado el portavoz del Real Automóvil Club de España (RACE), Antonio Lucas.
De hecho, este verano podría ser especialmente trágico. Si tenemos en cuenta solo las víctimas de los meses de junio y julio, el aumento de muertos en carretera es más que evidente. "Los conductores están respetando más lo límites de velocidad, pero se están cometiendo más imprudencias con dispositivos móviles", ha afirmado Rosa María Trinidad, de Stop Accidentes.
Ante estas imprudencias, ha arrancado una nueva campaña de vigilancia con especial atención en la velocidad. La DGT ha aumentado la presencia de los Pegasus. Controlan desde el cielo, pero en tierra también lo hacen más de 60 nuevos radares ligeros.
"Que nadie crea que los accidentes de tráfico se van a reducir por más multas. Hay que huir de esa política sancionadora que se basaba en la mera formulación de denuncias, de sanciones y de castigos, y pasar a políticas activas de prevención", ha opinado el presidente de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), Mario Arnaldo.
El último fin de semana de julio doce personas han fallecido en once accidentes de tráfico. Solo durante el mes de agosto se esperan más de 43 millones de desplazamientos por carretera.

Bajo investigación
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