Sobre el papel es un espacio protegido. La realidad, sin embargo, de la reserva regional del río Guadarrama es otra. Los vertederos ilegales en su cauce se multiplican. El vídeo muestra uno de los 17 vertederos ilegales de la zona, donde se pueden ver sofás, bolsas de basura, electrodomésticos, coches calcinados... todo juntoa al cauce del río Guadarrama, un sitio donde, dicen los vecinos, podían bañarse hace años.
"Antes esto se llenaba de gente que venía a bañarse, pero ahora está lleno de mierda", lamenta un vecino.
Los vecinos y Ecologistas en Acción llevan décadas denunciando esta situación. "Nosotros lo que pedimos es que haya mayor vigilancia, mayor presencia de agentes forestales, mayor presencia de vigilantes del parque regional", reclama Raúl Navarrete, portavoz de Ecologistas en Acción.
Muchos vecinos tienen miedo a hablar. Aquí llegan camiones a tirar escombros y chatarra, se producen vertidos sin depurar y las ratas campan a sus anchas "y se forman tapones de basura, neveras... ", denuncia Navarrete.
Piden soluciones a la Comunidad de Madrid, a los ayuntamientos afectados y a la Confederación Hidrográfica del Tajo. Que dejen de culparse los unos a los otros porque el daño medioambiental es ya irreparable.
