La autopsia realizada a la mujer fallecida en Baiona, Pontevedra, revela que murió a causa de los fuertes golpes que tenía en la cabeza. Ocurrió en la puerta de la casa de su expareja, en Baiona, Pontevedra. Un hombre con antecedentes penales y una orden de alejamiento desde hacía seis meses por malos tratos.

Pese a eso, a que no podía estar a menos de 200 metros de ella, fue este presunto asesino quien dio la voz de alarma porque se la había encontrado herida. Al llegar los sanitaros y confirmar la muerte, él rápidamente escapó de allí a pie. La policía sigue buscándole como principal sospechoso.

Estela, que era como se llamaba esta vecina de la localidad, sufría violencia machista. Tenía 36 años y una hija menor de edad. Formaba parte del programa de Viogen para mujeres maltratadas y su familia, que estaba al tanto del maltrato, está recibiendo ayuda psicológica.

Un amplio despliegue policial, medios aéreos incluidos, sigue buscado a su expareja, que no se descarta haya huido hacia Portugal y de ahí la solicitud de colaboración de la Policía portuguesa. De confirmarse el crimen machista, se llegaría a la cifra de 40 víctimas en lo que va de año.

Por su parte, el ayuntamiento de Baiona ha declarado 3 días de luto oficial, empezando este sábado.