Bic explicó en un comunicado que, de acuerdo con un estudio que llevó a cabo en junio, un 73% de los modelos de mecheros que hay en Europa no respetan la norma de seguridad ISO 9994 y "por tanto representan un peligro para los consumidores".
A su juicio, eso se explica por los "fallos en los controles aduaneros" de importaciones en la Unión Europea (UE), en particular en el puerto alemán de Hamburgo, principal puerta de entrada de los mecheros, y por falta de vigilancia en el mercado interior, sobre todo en Alemania y en Francia.
El director general de los mecheros de Bic, François Clément-Grandcourt, señaló que aunque los han alertado "desde hace 10 años", esos dos países "no han puesto en marcha las acciones que permitan poner fin a la salida al mercado de productos no conformes".
La empresa francesa calcula que cada año hay unos 30.000 accidentes "graves" a causa de los mecheros, y eso representa un costo para la sociedad que se cifra "como mínimo" en 1.000 millones de euros.
Las razones
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