Este viernes saldrá de España un avión militar rumbo a las Islas Malvinas para repatriar a los seis supervivientes y los cuerpos de los dos españoles fallecidos en el naufragio del pesquero 'Argos Gerogia'. Este desastre, que ha dejado un nueve muertos y cuatro desaparecidos, ha conmocionado a la comunidad pesquera de Ribeira, cuyos familiares esperan ansiosamente el regreso de sus seres queridos, mezclando alivio y tristeza por la pérdida de sus compañeros.

Las autoridades marítimas de Malvinas han apuntado que el hundimiento del pesquero pudo haber sido causado por la colisión con un bloque de hielo semihundido. Un portavoz explicó en 'Radio España' que, en esta época del año, la zona está llena de bloques de hielo a la deriva, lo que aumenta significativamente el riesgo de accidentes marítimos. Inicialmente, también se consideró la posibilidad de un choque contra un contenedor, pero esta hipótesis fue descartada por la ausencia de reportes de carga perdida en la zona.

Pedro Blanco, delegado del Gobierno de Galicia, afirmó que "parece razonable que se tome declaración a los supervivientes, hay que saber qué pasó". Hasta el momento, 13 tripulantes han sido rescatados con vida, mientras que las operaciones de búsqueda de los cuatro desaparecidos siguen suspendidas debido al mal tiempo.

José Antonio Fernández, familiar del capitán del Argos Giorgia, comentó que el estado psicológico de su pariente es crítico. "Está mal psicológicamente, está muy afectado, con magulladuras por el cuerpo, con hematomas, tenía un golpe en la cabeza", detalló. José Manuel Pena, primo del capitán, agregó que "han sido 20 horas continuas en la lancha, la lancha volcó dos veces y cayeron al mar, y tuvieron que volver a subir".