Karibu significa bienvenido en lengua Swahili y esta asociación es uno de los primeros lugares que los migrantes visitan cuando ponen un pie en España. Reciben alrededor de 150 mirantes al día. Unas personas que llegan a un país desconocido, solos en muchas ocasiones... y que todavía son cuestionados por crear una nueva vida.

Y con su llegada, cada vez son más los bulos que implican su mera presencia. Algo que en la mayoría de ocasiones no es cierto. Por ejemplo, se dice que los migrantes no suelen trabajar. "Más de un millón de personas de esos nuevos contratos de trabajo son migrantes", desmiente Pilar Cancela, Secretaria de Estado de Migraciones. Es decir, son personas que cotizan y pagan impuestos como el resto.

Y que tienen derecho a la sanidad pública, aunque en discrepancia con lo que se dice, no la colapsan. "De las 16 millones de consultas médicas, la de los migrantes solo corresponde el 11%", indica Cancela.

Incluso los empresarios reconocen que hay sectores desatendidos. Allí encuentran trabajo la mayoría de migrantes, que según datos de Cancela, suponen el 10,1% del PIB y solo representan el 1% del gasto público.

"La ultraderecha está cogiendo el terreno en Europa", culpa Nicole Ndongala, directora de Karibu, a la propagación de todos estos bulos.

Hasta con la cantidad de migrantes no se tienen claras las informaciones. "Tienen una percepción errónea sobre el porcentaje de migrantes, que dicen que está en el 25% cuando está en el 13,3%", apunta María Tejada, de la ONG ACCEM.