Trata de personas

Cae una red de trata que explotaba sexualmente a mujeres en pisos de Barcelona, Sevilla y Las Palmas

El 'modus operandi' Las víctimas eran captadas con falsas ofertas de trabajo y obligadas a prostituirse para pagar la deuda contraída por el viaje a España. Hacinadas en condiciones insalubres, las vejaban y amenazaban y las forzaban a consumir drogas.

Cae una red de trata que explotaba sexualmente a mujeres en pisos de Barcelona, Sevilla y Las Palmas

La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal que explotaba sexualmente a mujeres en 'pisos prostíbulo' situados en Barcelona, Sevilla y Las Palmas. Hay 14 personas detenidas, mientras que cuatro víctimas han sido liberadas y cuatro de estas viviendas han sido clausuradas.

Según ha informado este lunes el cuerpo policial, las víctimas, de origen latinoamericano, eran captadas para trabajar en España con ofertas falsas online. Por el traslado adquirían una 'deuda' que la red les obligaba a saldar ejerciendo la prostitución las 24 horas del día, siete días a la semana. El entramado también contaba con un piso que usaban como 'call center' para recibir llamadas de los clientes, atendido por mujeres que a su vez eran explotadas laboralmente.

Asimismo, la organización vendía sustancias estupefacientes. En total, la Policía ha detenido por estos hechos a 10 personas en la provincia de Barcelona, dos en Sevilla y otras dos en Las Palmas, una de las cuales ya ha ingresado en prisión provisional.

Engañadas para explotarlas sexualmente

La investigación se remonta a una denuncia de 2023 que alertaba de la existencia de una organización criminal que podía estar llevando a cabo trata de seres humanos con fines de explotación sexual y otros delitos en varias provincias españolas. La investigación confirmó posteriormente la presencia del entramado, asentado principalmente en Barcelona y con ramificaciones en Las Palmas y Sevilla.

A través de colaboradores en los países de origen de las víctimas, la red captaba a mujeres jóvenes y atractivas que vivían en estado de necesidad mediante ofertas de empleo ficticias para trabajar en España. Una vez convencidas, eran trasladadas en avión hasta Madrid, donde les revelaban la verdadera situación y las obligaban a ejercer la prostitución para pagar la 'deuda' adquirida por el traslado, que podía ascender hasta los 4.000 euros.

Las víctimas eran distribuidas entre los distintos pisos de la organización, donde tenían que estar disponibles las 24 horas del día, siete días a la semana y obtenían solo el 50% de los beneficios generados. Vejadas y amenazadas por los explotadores, eran forzadas a consumir drogas y sometidas a un estricto control que las obligaba a permanecer la mayor parte del día en esos pisos, con salidas limitadas al exterior.

También las obligaban convivir y dormir en esos mismos pisos donde eran explotadas sexualmente, hacinadas en condiciones insalubres en una única habitación llena de cochones, con numerosos cortes de suministros esenciales como la luz o el agua. Además, tenían que sufragar ellas mismas todos los gastos relacionados con la vida diaria.

Explotación laboral y drogas

El entramado criminal contaba con una importante infraestructura en España. Además de los 'pisos prostíbulo', la red tenía otro inmueble que usaban como 'call center': allí explotaban laboralmente hasta a siete mujeres en tareas de recepción de llamadas de los clientes que solicitaban los servicios sexuales de las otras víctimas.

A su vez, la red incrementaba sus beneficios vendiendo sustancias estupefacientes a los clientes, como cocaína, tusi y anfetaminas, así como medicamentos para la disfunción eréctil. Los investigadores descubrieron que el principal cabecilla de la organización habría recibido a través de una aplicación de pago por teléfono móvil más de 800.000 euros en los últimos cuatro años, dinero presuntamente proveniente de las actividades ilícitas desarrolladas.

Durante esta operación, los agentes registraron cinco viviendas en las que intervinieron joyas por valor de 30.000 euros, 4.530 euros en metálico, 35 gramos de cocaína, 337 gramos de anfetamina, 11 gramos de cannabis y 98 pastillas para la disfunción eréctil.