A Coruña se ha convertido en el epicentro de una nueva investigación judicial relacionada con el sector de la limpieza. Este jueves, se ha revelado que Miguel Ángel Sánchez, exlíder del sindicato de trabajadores de limpieza, está siendo investigado por presuntos delitos de blanqueo, estafa y corrupción. Según la investigación, Sánchez supuestamente cobraba a personas desempleadas para "enchufarlas" en el servicio de limpieza municipal.

En los últimos años, A Coruña ha sido escenario de hasta tres huelgas de limpieza, todas bajo el liderazgo de Sánchez. La más reciente terminó con la quema de camiones de basura, un acto que el propio exsindicalista condenó públicamente. "Repudiamos los actos vandálicos que tratan de asociarnos deliberadamente", expreso en aquel momento.

Sin embargo, las denuncias contra él han arrojado una luz diferente sobre su figura. Francisco Jorquera, portavoz del BNG en A Coruña, denunció: "Cobraban mordidas por colocar trabajadores. Su patrimonio acumulado es algo que cualquier trabajador desearía".

Sánchez, quien dirigió el sindicato hasta el pasado 14 de agosto, ha negado rotundamente las acusaciones. "Si son miembros de la plantilla, pueden ser de otra central sindical o de otra dirección política, lo único que quieren es hacernos daño", declaró.

El exlíder fue despedido por la empresa encargada del servicio de limpieza, acusándolo de incumplir sus obligaciones y de incitar a otros trabajadores a hacer lo mismo. Ahora, la justicia ha puesto su foco en él para determinar la veracidad de las acusaciones que pesan sobre su gestión sindical.

Rafa Mir

Testimonio clave

La contradicción del testigo del caso Rafa Mir en su declaración: afirma "no saber lo que hicieron" y también que "fue consentido"

El acompañante de Rafa Mir y Pablo Jara negó ante la jueza tener conocimiento de los hechos denunciados por las dos víctimas. También relató que Jara se escondió para evitar ser identificado.