La OMS ha indicado en más de una ocasión cómo debe ser la ducha ideal. Según han desvelado, para hacerlo correctamente tendríamos que tardar un total de cuatro minutos en ducharnos, tanto por sostenibilidad como por ahorro de energía.

Sin embargo, al preguntar a algunas personas en la calle, parece que casi todas suelen gastar mucho más tiempo. "Tardo una media hora", reconoce una joven. Pero el tiempo que tardamos no es lo único a lo que debemos prestar atención.

Además, es importante seguir una serie de indicaciones para el cuidado de la piel. De esta forma, la ducha perfecta sería aquella que se realiza con agua tibia, jabones neutros y rápida. "Una temperatura muy alta puede activar nuestra histamina y hacer que tengamos los típicos picores", explica Natividad Cano, Dermatóloga y directora médica Instituto Natividad Cano.

Lo cierto es que, aunque a algunas personas les parezca poco tiempo, en cuatro minutos usamos 80 litros, que al final también acaban yéndose por el desagüe. Por este motivo, es importante tomar conciencia y realizar una ducha responsable.