El Ministerio de Interior investigará, a través de la Oficina Nacional de Garantía de los Derechos Humanos (ONGADH), si la actuación de dos agentes de la Policía Nacional con dos personas negras, en el barrio madrileño de Lavapiés, vulneró los Derechos Humanos. Analizarán situaciones muy criticadas como el golpe que le pega uno de los policías a uno de los detenidos en el cuello, cuando a éste, al menos en gestos, no se le ve, en un vídeo difundido en redes sociales, con una actitud violenta. También los porrazos que el mismo agente le pega a la otra persona detenida y paralizada en el suelo por su compañero, o la manera de reducir a ambos.
El domingo tuvo lugar una manifestación donde sus participantes denunciaban estos hechos y condenaban esta violencia. Entre los que denunciantes está SOS Racismo. "Son dos policías conocidos en el barrio de Lavapiés. Son actuaciones normales y de identificación por perfil étnico-racial. Las personas negras y racializadas están siendo asediadas, están siendo perseguidas por la policía", determina la portavoz de esta asociación antirracista en Madrid, Sarahi Boleko.
La Policía Nacional mantiene que la actuación de sus compañeros fue proporcionada y que los detenidos venían de mantener una actitud violenta en un supermercado. De hecho, inciden en que sus compañeros tienen lesiones provocadas por los dos detenidos, que participaban, inciden, en una reyerta en la puerta del comercio. Mohamed, uno de los vigilantes de seguridad que asegura haber sido testigo de los hechos, dice que "entraron en la tienda con una actitud violenta y nerviosa".
Que estuvieran generando un problema antes, según los colectivos sociales, no es una razón para pegarles después porque sí. "Un policía que está formado y representa la ley en la calle, no puede actuar así e ir directamente a por el cuello del chaval", manifiesta el activista y secretario de Antirracismo de Podemos, Serigne Mbayé.
Desde el Sindicato de la Policía Unificada subrayan que, en determinados contexto, sí que se tiende a identificar a más gente negra. "Si los que protagonizan los delitos de menudeo en esa zona son de raza negra, vamos a ir a quien muestre esa actitud huidiza...", indica. Para muchas organizaciones, este tipo de estrategias policiales son racistas.