Lo conoció a través de las redes sociales y nos cuenta que enseguida cayó en sus redes. Una mujer de A Coruña nunca lo llegó a conocer en persona, pero asegura que en tan solo cuatro meses le ha dado más de 21.000 euros. Tal era el supuesto idilio: "Que me pide el matrimonio, que está loco por mi... y accedo".
Eso si, tuvo que pagar 1.500 euros por contraer matrimonio a distancia. Y le mandó un certificado. Cuando no era el certificado de matrimonio, el supuesto hijo del estafador necesitaba un nuevo portátil. "Mando 700 euros para que el niño se compre el ordenador", añade la víctima.
El menor de 16 años también estuvo supuestamente ingresado en un hospital de Nigeria. Los gastos de la clínica privada, ascendía a 15.000 euros, la víctima sufragó los gastos: "Pedí un préstamo al banco de 15.000 euros".
Las fotos de perfil del estafador usurpadas también. Pertenecen a la cuenta de Instagram de un neurocirujano brasileño, que ya también lo ha puesto el caso en manos de su abogado. "Se trata de una estafa internacional elaborado por profesionales", señala Estanislao De Kostka, el abogado de la estafada.
La Interpol está detrás de esta supuesta estafa. Creen que una o varias personas están cometiendo este engaño desde países como Nigeria o Rumanía, hasta donde podría haber llegado el dinero de muchas víctimas más.