La Guardia Civil ha desmantelado una organización delictiva y ha detenido a nueve personas que presuntamente vendían marihuana camuflada en envoltorios de golosinas en establecimientos de nutrición deportiva, 'growshops' (tiendas de cultivo), estancos y estaciones de servicio de varias provincias españolas.
Vainilla, helado y chicle son algunos de los sabores 'extra' de la marihuana con un “alto nivel de toxicidad” que vendía la organización criminal, según han informado a EFE fuentes de la Guardia Civil.
La operación, coordinada por la Fiscalía de Almería y el Juzgado de Primera Instancia de Berja (Almería), se ha saldado con nueve detenidos y 147 investigados, tras realizar cuatro registros en Granada y Valencia, y hasta 244 inspecciones en establecimientos de 31 provincias españolas.
Se trata de la primera operación de este tipo desarrollada en España, según las mismas fuentes, que han explicado que la trama publicitaba sus productos como "cultivo ecológico de cáñamo, flor de uso ornamental y coleccionismo", y ofrecía envoltorios y botes con nombres y colores que simulaban los de las golosinas y que iban del gramo a los 20 gramos, con precios entre los 6,50 y los 30 euros.
En este sentido, cada tipo de marihuana ofrecía un "sabor extra" y tenía un alto contenido en THC, que aumenta su toxicidad con respecto a la que habitualmente se encuentra a la venta de forma ilegal, han precisado las fuentes del Instituto Armado.
Los productos se encontraban al lado del tabaco y las chocolatinas en establecimientos a los que se suministraba la marihuana con una "base de legalidad camuflada". Asimismo, han destacado la intervención llevada a cabo en una empresa de Granada, que según han apuntado a EFE otras fuentes cercanas al caso, se trata de Relash Lab Corporation 420 SL, con sede en una nave en el polígono 'La Paloma' de Padul (Granada).
Según estas fuentes, en la nave se había dispuesto una zona de recepción al público en la planta baja en la que era posible probar hasta una veintena de sabores de la marihuana. Además, en la segunda planta, los detenidos contaban con un laboratorio en el que trabajaban químicos y otros profesionales para que la limpieza de los cogollos fuese "perfecta", con bidones para aportar los diferentes sabores y un proceso de tratamiento para seguir la producción, fecha y generar albaranes.
Además, contaban con una zona de plantación y otra de administración para poder atender pedidos a través de Internet, que eran remitidos por mensajería o para atender a los grandes clientes del supuesto entramado.
En la operación, se han intervenido cerca de dos toneladas de cogollos de marihuana, más de 100 plantas de marihuana, 12 kilos de picadura de hachís, más de cinco kilos de resina de hachís, dos vehículos, cerca de 20.000 euros en efectivo y otros 51.000 euros inmovilizados en una cuenta bancaria a disposición judicial y diverso material informático, ha informado el Instituto Armado en un comunicado.
La operación se inició a raíz de varias investigaciones llevadas a cabo por la Guardia Civil en Almería tras tener conocimiento de que en diferentes establecimientos de la provincia se estaban comercializando productos psicotrópicos derivados del cannabis con apariencia legal.
Las actuaciones se han llevado a cabo en las ocho provincias andaluzas, Asturias, Cantabria, Castilla-La Mancha (Albacete, Ciudad Real y Cuenca), Castilla y León (León), Cataluña (Barcelona y Gerona), Navarra, Comunidad Valenciana (Alicante y Valencia), Galicia (La Coruña y Pontevedra), Baleares (Mallorca, Ibiza y Formentera), La Rioja, Madrid, Murcia, País Vasco (Guipúzcoa y Vizcaya), y Aragón (Huesca y Zaragoza).