Según ha informado hoy la Policía Nacional en una nota de prensa, "en el inmueble, además de servicios sexuales, se ofertaban sustancias estupefacientes no sólo a los clientes, sino también a las propias víctimas, para aumentar así los beneficios que obtenían ilegalmente".
"La investigación comenzó cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de una página web que ofrecía este tipo de servicios sexuales, así como varias sustancias estupefacientes. Los datos aportados gracias a la colaboración ciudadana permitieron la obtención de indicios acerca de la actividad ilegal de los detenidos", añade la Policía Nacional.
Tras rastrear los anuncios y varios perfiles en redes sociales relacionados con ello, los investigadores detectaron la presencia de un joven menor de edad. "Una vez localizado el piso de citas donde se ofrecían los servicios sexuales y las sustancias estupefacientes, los hechos se pusieron en conocimiento de la autoridad judicial, con cuya autorización los agentes registraron dicho domicilio e intervinieron dinero en metálico, varias sustancias estupefacientes, diversa documentación y efectos personales del menor de edad que estaba siendo explotado", agrega la nota.
Según la Policía Nacional, "las víctimas se encontraban hacinadas en condiciones insalubres y degradantes y se veían obligadas a ejercer la prostitución durante las 24 horas del día, todos los días de la semana. Además eran engañadas por sus proxenetas en el acuerdo de reparto de dinero obtenido por sus servicios".