Agentes de la Guardia Civil han detenido a un hombre jubilado, de 64 años, por presuntamente vender cocaína en una zona de ocio de la localidad alicantina de Guardamar del Segura, donde fue sorprendido con 18 dosis de droga.
La "particularidad" de esta actuación policial, según han indicado los agentes, radica en que el detenido es un jubilado de 64 años que, al parecer, se dedica a merodear por la zona de ocio de la localidad en su coche y entrega droga a sus clientes, directamente en el lugar donde éstos se encuentren, sin tener un punto fijo de distribución de la droga.
El instituto armado, en un comunicado, ha hecho hincapié en que el detenido "pasaba totalmente desapercibido debido a su edad". Finalmente, el pasado 9 de junio, la actitud del hombre llamó la atención a los agentes: el sospechoso no paraba de dar vueltas con su coche a una calle en la que hay varios bares y una sala de apuestas.
Transcurridos unos minutos, el hombre bajó del turismo y deambuló por las calles cercanas, para regresar momentos después a su vehículo. Los agentes decidieron identificarle y realizar un cacheo superficial de sus pertenencias. Así encontraron un bote metálico en el que el hombre portaba 15 bolsitas plásticas, a primera vista dosis de cocaína.
Al registrar el vehículo del hombre, los agentes encontraron tres dosis más y 243 euros en billetes pequeños supuestamente procedentes de la recaudación de ventas recientes de cocaína. Ante los hechos, detuvieron al hombre por un presunto delito contra la salud pública, por tráfico de drogas.
Después, los agentes del Area de Investigación de la Guardia Civil de Guardamar registraron el domicilio del arrestado y hallaron material que, al parecer, el detenido empleaba para la manipulación y dosificación de la droga, así como también diversas cartillas bancarias, con saldos "considerables". El detenido, tras pasar a disposición de la Autoridad Judicial, ha ingresado en prisión provisional, a la espera de juicio.