La Ertzaintza ha detenido este martes a otro hombre de 18 años relacionado con la brutal paliza que el pasado 25 de julio de madrugada propinaron en la localidad vizcaína de Amorebieta una veintena de integrantes de una banda violenta, llamada 'los hermanos Koala', a un joven de 23 años para robarle. Con la detención del menor también de esta mañana ya son doce el total de arrestados por esta agresión.
La Ertzaintza, en colaboración con la Policía Local de Amorebieta, mantiene abierta la operación policial, y trabaja para identificar y localizar a todos los autores de la brutal paliza, en la que, por el momento se ha detenido a seis menores y seis adultos. La investigación ha determinado que los implicados pertenecen a una banda juvenil violenta denominada Los Hermanos Koala.
El joven agredido, de 23 años, permanece en coma ingresado en el Hospital de Cruces. Además, según la última resonancia practicada sobre la víctima, del pasado fin de semana, el joven ha sufrido importantes daños en la parte izquierda de su cerebro. Concretamente, la zona que correspondería al habla.
12 arrestados en total
El juez ordenó este lunes el ingreso en prisión de uno de los últimos detenidos por la brutal paliza, que esa misma mañana ha accedido al recinto. De este modo, ya son 12 las personas arrestadas, aunque la Policía sigue investigando a más participantes.
Los agresores son viejos conocidos de la Policía vasca y pertenecen a una pandilla autodenominada "Los Hermanos Koala". Ya estaban en el radar de la Ertzaintza como "banda conflictiva y violenta", según confirmaba el vicelehendakari primero y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka.
De hecho, no se trata de la primera paliza que propinan a una persona y siempre repitiendo modus operandi, como se puede comprobar en el siguiente vídeo:
55 antecendentes
Detenido en Barcelona un hombre de 33 años acusado de cometer seis robos con violencia
Localizaba establecimientos con un único trabajador, realizaba su pedido y al proceder al pago, aprovechando el despiste del dependiente, lo amenazaba con un arma hasta que le entregaba el dinero de la caja registradora.