Los padres de los niños hallados muertos en Godella permanecen detenidos por un supuesto delito de homicidio, según la Guardia Civil.
Ambos permanecerán en el cuartel de la Guardia Civil de Moncada hasta que pasen a disposición del juzgado de Paterna que se ha hecho cargo del caso, previsiblemente mañana.
Los resultados de la autopsia que se va a practicar a los menores determinarán el motivo del fallecimiento que, por el momento, no ha sido concretado por la Guardia Civil.
Los cadáveres de los dos niños fueron hallados, enterrados, por agentes de la Guardia Civil tras varias horas de búsqueda e interrogatorio a sus progenitores.
El padre ha asegurado ser seguidor de los 'Iluminati' y confesó a los agentes la complicada relación que mantenía con su pareja, a la que definió como "inestable".
Las víctimas son un niño de tres años y medio y una niña de apenas cinco meses, de cuya desaparición se tuvo constancia tras una discusión entre los padres, de la que alertaron a las fuerzas de seguridad varias llamadas, según el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Fulgencio.
Tanto el padre como la madre fueron conducidos al cuartel de la Guardia Civil de Moncada para ser interrogados y, tras varias horas de intentos infructuosos, relatos delirantes y una actitud de "escasa colaboración", finalmente los agentes lograron que la madre les condujese al lugar en el que se encontraban enterrados sus hijos, aunque no confesó la autoría del crimen.
Durante toda la mañana de este viernes, agentes de la Guardia Civil han permanecido con sus pesquisas en la zona donde fueron hallados los menores y en la casa abandonada donde residían con sus padres. En una de las fachadas de este inmueble, situado en una zona aislada, se puede leer la frase pintada "vais a morir todo".
En las últimas horas, los agentes han rastreado tanto la casa como los alrededores y la zona donde fueron enterrados los niños para recoger pruebas del suceso.
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