La Guardia Civil ha desmantelado en Escatrón (Zaragoza) una secta, denominada EVOL, que captaba a sus miembros en talleres que eran publicitados como retiros para el autoconocimiento y el crecimiento personal. Han sido detenidos el líder y los colaboradores de esta "secta destructiva" en la localidad zaragozana.
El líder de la secta, a la que bautizó como EVOL, difundía un discurso catastrofista, idealizándose éste como el único capaz de salvar a la sociedad. Los cuatro detenidos, manipulaban a sus víctimas provocando la ruptura de éstas con sus relaciones externas para crear una dependencia total hacia el líder.
Las víctimas, la mayoría mujeres, sufrían agresiones, vejaciones y amenazas del líder, quien además buscaba conseguir un beneficio económico. Según ha informado este viernes el Instituto Armado, la secta ha sido desmantelada en el marco de la 'operación Mileniocat' y en la misma han sido detenidas cuatro personas por los delitos de asociación ilícita y estafa.
Al líder de la secta también se le imputan amenazas, coacciones y lesiones. La investigación se inició tras recibirse en Barcelona varias denuncias de víctimas que habrían formado parte de esta secta, cuyo responsable habría empleado técnicas de alteración y manipulación psicológica y agresiones físicas para provocar una total dependencia hacía él y conseguir un beneficio económico.
Un discurso catastrofista
Durante los talleres que organizaba la secta, el líder y sus colaboradores comenzaban una labor de manipulación sobre las víctimas. Buscaba que rompieran con todas sus relaciones externas para captarlas, tras lo cual eran invitadas a convivir con ellos bajo las enseñanzas y directrices que marcaba el líder.
La secta Evol se constituyó en 2018 en un lugar aislado de Escatrón. El líder difundía un discurso catastrofista, idealizándose como el único capaz de salvar a la sociedad, e indicaba a los miembros que no debían tener contacto con el mundo exterior al estar "corrupto" y "enfermo", sufriendo agresiones si llevaban a cabo alguna relación externa.
Destacaba el papel fundamental de la mujer, buscando que en su mayoría la secta estuviera constituida por mujeres. Empleaba medios de manipulación, alteración de la personalidad, medios violentos y vejaciones para establecer sus enseñanzas, ejerciendo un control absoluto sobre sus víctimas.
El líder y sus colaboradores conseguían aportaciones económicas de sus víctimas que les permitían mejorar las instalaciones de la secta y llevar a cabo nuevos talleres para captar a más personas. Durante los registros realizados en la fase de explotación, se intervino diferente documentación empleada por el líder y sus colaboradores para los procesos de captación y manipulación. Se registró todo el emplazamiento de la secta, que albergaba una gran extensión de terreno y diferentes construcciones.