Un joven de 19 años, con iniciales A. M. P., ha sido detenido este sábado como presunto autor del homicidio de su padre, J. M. B, de 59, cuyo cuerpo fue localizado en la pasada madrugada en su domicilio de Esteiro, en la localidad coruñesa de Muros, con signos evidentes de muerte violenta. El joven permanece bajo custodia policial mientras que continúan las diligencias de la investigación, de la que se ha hecho cargo el Equipo de la Policía Judicial de Noia (A Coruña). Entre otras, se practica la inspección ocular del domicilio donde se produjo el supuesto homicidio, en el que se registraron importantes destrozos.
El Servizo de Urxencias Sanitarias de Galicia-061 confirmó la muerte violenta a primera hora de este sábado. La alerta sobre la existencia de una agresión y una persona herida en una vivienda de este municipio coruñés se produjo sobre las 00:42 horas de la madrugada. Al lugar del suceso acudieron una ambulancia asistencial de soporte vital básico, así como personal sanitario del PAC de Muros. El 061 informó posteriormente de la muerte violenta del hombre y también de que fue atendido un joven de 19 años e iniciales A.M.P., que fue dado de alta allí mismo.
Este joven de 19 años es el hijo del fallecido y ha sido detenido por el supuesto homicidio de su padre, mientras se continúa recabando datos para aclarar las circunstancias de lo ocurrido. Por el momento, la Guardia Civil no ha confirmado oficialmente el arma con la que se habría producido la muerte violenta, aunque fuentes conocedoras del caso han indicado a Europa Press que se habría tratado de un machete o un objeto de características similares. La autopsia determinará con mayor claridad las circunstancias concretas del fallecimiento.
Fuentes municipales consultadas por Europa Press han indicado que el hombre fallecido era "muy conocido" porque Esteiro es "muy pequeño" y había regentado un bar situado, precisamente, en el bajo del inmueble en el que se produjo la agresión. En la actualidad, el negocio estaba cerrado. Las mismas fuentes han precisado que hubo vecinos que, horas antes de que trascendiera el suceso, oyeron golpes en la vivienda. Y que habitualmente, en la misma, había discusiones, que atribuyen a que el joven tenía "problemas".