La Policía Nacional detiene, en Carabias (Segovia), al hombre sospechoso de asesinar a su suegro el pasado jueves con un arma blanca en Aranda de Duero (Burgos), un crimen tras el que hay un caso de violencia machista.

La detención, que ha llevado a cabo agentes de la brigada de Policía Judicial y Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Aranda de Duero, ha tenido lugar en una zona rural del municipio segoviano. Según informa la Subdelegación de Gobierno, el individuo ha mostrado resistencia y ha intentado evitar su arresto, sin éxito, embistiendo a varios coches policiales con el vehículo con el que huyó del lugar del crimen. Un acto que provocó heridas leves en tres de los agentes.

Tras esto, el presunto asesino huyó a pie y fue reducido con un disparo de una pistola táser; por el que tuvo que ser trasladado en ambulancia al hospital de Aranda, donde está bajo custodia policial hasta que pase a disposición judicial una vez que concluya el atestado.

El homicidio del que se le acusa tuvo lugar en la tarde del pasado jueves, cuando el hombre, de 72 años de edad, se acercó al piso que compartía la pareja. Allí se encontró con el que fue su suegro y mantuvieron con una fuerte discusión que terminó con el asesinato del anciano.

Según ha explicado el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, la hija de la víctima mortal y pareja del detenido acudió a la Policía Nacional momentos antes del crimen para presentar una denuncia solicitando protección. La mujer fue incluida en el sistema VioGén destinado al seguimiento y protección de las víctimas de violencia de género y de sus hijos al considerarse un caso extremo. Tanto la mujer, como su hija y la abuela -mujer del asesinado- fueron trasladadas a una casa de acogida.

Al parecer, el agresor y con quien la mujer mantenía una relación desde que eran jóvenes -también tenían una hija en común-, empezó a tener problemas con las drogas este verano que "no ha podido controlar" y le ha llevado a protagonizar varios episodios "problemáticos".

La principal hipótesis que manejan los agentes es que el suegro del arrestado, de unos 70 años de edad, acudió al domicilio donde vivía su yerno, quien lo mató con un arma blanca. Estas mismas fuentes han explicado que los agentes, alertados por la propia hija, acudieron al lugar y pidieron asistencia médica para el hombre. Hasta allí se envió un equipo médico y una ambulancia que no pudieron más que certificar el fallecimiento. En todo momento, la mujer del arrestado, junto a su hija menor de