El pasado diciembre un hombre de 47 años fue detenido por presuntos abusos sexuales a 11 niños de entre 11 y 13 años en Valdeavero, Madrid. Con el paso del tiempo fueron otros tres varones los que afirmaron sufrir tocamientos y vejaciones. Ahora han sido dos más los niños los que denuncian los hechos para elevar la cifra total a 16.
'El Toba' (así es como se conoce a Cristóbal L.C.) estaba siendo investigado por nueve delitos continuados de abusos sexuales y dos más de aviso con acceso por vía bucal. Estaba previsto que declarase a finales de enero, pero el volcado de su teléfono móvil, así como la investigación de estos datos, han retrasado su interrogatorio.
La Guardia Civil comenzó una investigación el pasado agosto cuando una madre denunció los hechos. Alegó que su pequeño le contó lo sucedido cuando este se negó a jugar con el hijo del denunciado. Tras ser preguntado por qué, acabó confesando que era por la actitud del frutero.
La Benemérita arrestó a Cristóbal el pasado diciembre y lleva desde entonces ingresado en prisión provisional. Actuaba solo y chantajeaba a los niños con bolsas de gusanitos o caramelos gratis a cambio de meterles la mano en el pantalón. Tenía el favor de todos y se había ganado el respeto del pueblo tras 16 años viviendo allí.
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El detenido afrontará su interrogatorio judicial a partir del próximo 21 de abril. De confirmarse todos los hechos recogidos, la pena podría ascender a decenas de años entre rejas.
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Localizaba establecimientos con un único trabajador, realizaba su pedido y al proceder al pago, aprovechando el despiste del dependiente, lo amenazaba con un arma hasta que le entregaba el dinero de la caja registradora.