El papel del imán de Ripoll fue más lejos de lo que se pensó en un principio; ahora se sabe que el cerebro de los atentados de Barcelona y Cambrils pudo ser confidente de Centro Nacional de Inteligencia.
Abdelbaki Es Satty murió en la explosión accidental de Alcanar cuando preparaban la masacre. El CNI admite que en 2014, cuando el imán estuvo en prisión por un asunto de drogas, mantenía contacto con él, pero justifican que eso es algo habitual.
La información la adelantó OK Diario y ha podido ser confirmada por laSexta. No sé conoce exactamente ni cuánto tiempo ni en calidad de qué fueron esos contactos. El imán tuvo durante su tiempo en la cárcel una orden de expulsión pendiente, pero fue anulada por un juez en marzo de 2015.
Otro detalle que ahora también se conoce es sobre el autor material del ataque de las Rambas. Younes Abouyakub, el terrorista que huyó tras los atropellos fue contactado por los Mossos. Ocurrió dos horas antes del ataque con la furgoneta alquilada.
Los Mossos le contactaron para avisarle de que su coche aparcado junto a la casa de Alcanar había sido afectado por la explosión. Esa llamada quedó en una conversación de cuatro minutos con un familiar porque no pudieron hablar directamente con él.