Con estas temperaturas tan gélidas, a menos de un grado de sensación térmica, las personas sin hogar esperan entrar en los autobuses que los dirigen a un recurso de la 'Campaña de Frío' de Madrid. Tras dos horas probando suerte, reciben la peor de las noticias. "Chicos, lo sentimos, no hay más plazas. Mañana lo intentamos", les avisan.
Se quedan 30 personas en la calle y entre ellos se hace patente la indignación y frustración. "Siete noches haciendo la cola y siete noches que me dicen que no hay puesto", cuenta uno de ellos.
Es el caso también de tres refugiados que llevan más de 20 días tratando de entrar, sin suerte, en este recurso y están sufriendo las consecuencias del frío. "Estuve dos días hospitalizado. Empecé a tener una tos muy fuerte y a vomitar sangre, y llamaron a una ambulancia", relata uno de ellos.
Ante la imposibilidad de dormir a reguardo, se las ingenian para no pasar la noche en las gélidas calles: "Nuestra última estrategia es meternos en autobuses e ir recorriendo Madrid para pasar la noche", explica.
Entre el 40 y el 60% de los usuarios de la campaña de frío son solicitantes de asilo.
Trabajadores del Samur denuncian que este problema de saturación lleva ya años,aunque algunas ONGs denuncian que la falta de opciones para muchos refugiados ha agravado el problema. "Se llegan a quedar 55, 25, 15, según el día....", cuenta Alfonso García, de la Red Solidaria de Acogida. Entre el 40 y el 60% de los usuarios de la campaña de frío son solicitantes de asilo.
Desde el Ayuntamiento dicen que la competencia es del Ministerio, pero que ellos van a actuar. José Aniorte, delegado de Bienestar Social del Ayuntamiento, explica que en una semana abrirán un nuevo recurso para solicitantes de asilo en Vallecas".
Mientras tanto, decenas de personas buscan refugio cada noche en cualquier hueco caliente de la ciudad.
Multitudinaria manifestación en Valencia
Una madre, contra la desastrosa gestión de los centros educativos en las zonas afectadas por la DANA: "Las cosas no se están haciendo bien"
"Las cosas no se han hecho bien, ni se están haciendo bien", ha indicado esta madre del colegio Jaume I, de Paiporta. Protesta por el caos y desorganización en la gestión, así como por la ausencia de "caminos seguros" para asistir a ellos.