En un gesto encomiable, el diputado laborista Russell-Moyle ha contado en el Parlamento británico que hace casi una década descubrió con una prueba de VIH que se había infectado.

El VIH es un poco menos tabú gracias a esta valiente revelación. El parlamentario se atrevió a contar cuál era su realidad y explicó que, gracias al tratamiento seguido en estos años, ahora tiene un VIH no detectable, con el que no enfermará ni transmitirá el virus.

Russell-Moyle hizo un llamamiento para que la gente se haga la prueba: "A aquellos que no se han hecho la prueba aún, puede que por miedo, les digo que es mejor vivir con conocimiento que morir con miedo".

Es más, el laborista llegó a afirmar que "es más seguro tener sexo con una persona con VIH no detectable que con una persona sin diagnóstico", y lanzó un discurso esperanzador al que le siguió un emotivo aplauso de los parlamentarios presentes: "Les digo a aquellos que viven con VIH que su estado no les define; podemos ser lo que queramos ser".

Cartel de concienciación sobre el Sida