Completamente destrozado: así quedó el frontal del coche tras impactar contra un árbol. El conductor, de 56 años, ya había muerto cuando llegaron los servicios de emergencia. La Guardia Civil se dirigió entonces hasta su casa para comunicárselo a su familia.
Cuando los agentes cruzaron esta puerta hallaron el cuerpo sin vida de su mujer, de 52 años. Había sido apuñalado y estaba en medio de un charco de sangre. Se inicia entonces una investigación como un caso de violencia machista, según ha confirmado ya el Gobierno.
La colisión se produjo en la vía que hay justo delante del domicilio del matrimonio, a tan solo unos 200 metros. El cuerpo del marido también presentaba varias heridas de arma blanca anteriores al choque. Las dos principales hipótesis son: que el hombre se suicidara tras apuñalar a la mujer, o que sufriera un accidente de tráfico al intentar huir.
"Es complicado. Tan complicado que la propia juez ha dicho que se declara secreto de sumario", ha anunciado Eduardo Echevarría, delegado del Gobierno en Cantabria. La pareja tenía dos hijos. Aunque vivían en Zaragoza, llevaban una temporada en Escalante.
La mujer no había presentado denuncias previas por malos tratos. Con este caso serían ya 36 las mujeres asesinadas en España en lo que va de año por violencia machista a manos de sus parejas o exparejas.