En una cena de Navidad, una quedada entre amigos o en cualquier otro evento, podría ocurrir un imprevisto que haga que una reunión acabe en tragedia. A José Antonio, el marido de Trini, le cuesta respirar. Está sufriendo un atragantamiento y Trini te enseña cómo reaccionar ante este tipo de situaciones con unos sencillos pasos.
"Primero, animar a la víctima a que tosa", y si no funciona, "dar cinco palmadas fuertes entre los omóplatos", en la espalda de la víctima. Pero si esto no funciona, hay que recurrir al último paso: la maniobra de Heimlich. "Rodeo la cintura por debajo de las axilas, formamos un puño con las dos manos en la boca del estómago, dando fuertemente hacia arriba cinco veces", explica.
Con estos sencillos pasos puedes salvar la vida a alguien en cualquier ocasión. Hasta el médico da la razón a los consejos de Trini, pero añade, además, que "si esa persona pierde el conocimiento, tendríamos que actuar como ante una parada cardíaca".