El coronavirus también está dejando historias emocionantes de generaciones que se encuentran. Es el caso de Julián y su abuelo Olegario, de 88 años, a quienes la pandemia les ha regalado un emotivo momento. Y el que Julián, enfermero, tuvo la ocasión de vacunar a su abuelo, dejando una bonita instantánea que compartió en sus redes sociales.
"Vacunar del COVID-19 a mi abuelo es una de las cosas más grandes que me han pasado nunca", afirmaba en su cuenta de Twitter, poniendo dos fotos junto a su abuelo. En una, se le ve en sus primeros años de vida siendo cogido en brazos por su abuelo; en la otra, es él el que 'aúpa' a su abuelo, administrándole la vacuna contra el coronavirus.
Julián es estudiante de enfermería en Castellón. Como parte de su programa de prácticas, tiene la misión de poner vacunas contra el COVID-19 en un centro de salud de la localidad, encontrándose con su abuelo.
"Tenían que ponerle la segunda dosis el miércoles y les dije que me avisaran. Una compañera me dijo que nos hacía la foto", cuenta Julián a laSexta. "Siempre es bonito vacunar", añade, más si cabe a "los más afectados por la pandemia", nuestros mayores.
Este estudiante de tercero tiene por delante tres meses más de prácticas en los que espera poner muchas más vacunas. En el caso de Olegario, le tocó recibir la vacuna de Pfizer, recibiendo la primera dosis de la misma a principios de mes y la segunda, el miércoles 24.
Por tanto, es ya uno de los 2.505.842 de españoles que han logrado la inmunidad contra el COVID-19. Ahora, se encuentra en "perfecto" estado, como nos cuenta Julián, sin efectos secundarios y preparado para la nueva normalidad.
Sobre la primera foto, en la que los dos protagonistas de esta bonita historia aparecen con unos años menos, Julián reconoce que no tenía "ni dos años". Quién le iba a decir a Olegario entonces que su nieto le daría, a él y a muchos más, la cura contra el virus que nos ha cambiado a todos para siempre.
"La red ya no (se) sostiene"
Las trabajadoras de la red de violencia de género, en huelga por la "saturación y precariedad" en el sector
¿Cómo te afecta? La saturación y precariedad de los servicios afectan la protección de mujeres y niños de violencia machista. Las profesionales alertan de que las carencias de la red dificultan la recuperación de las víctimas.