La madre y el hijo de nacionalidad alemana que se encontraban desaparecidos en Adeje, Tenerife, han sido encontrados sin vida, según informa el periodista Manuel Marlasca. El marido de la mujer, Thomas Handrick, había sido detenido por su desaparición, sospechoso de un delito de violencia de género.
Los cadáveres se encontraban en el interior de una cueva, a unos cuatro kilómetros de donde apareció el otro hijo de la pareja, de cinco años, que fue hallado solo y desorientado en una zona de monte de dicha localidad tinerfeña.
Este relató a la Guardia Civil que su progenitor les había llevado a dar un paseo y les condujo hasta una cueva, donde comenzó a golpear a la madre, Silvia, y al hijo mayor, de 10 años. Ahora, los agentes creen que el detenido los mató a golpes.
El menor aseguró que había visto una gran cantidad de sangre cuando huyó de la agresión. Tras escapar de la paliza, fue hallado por un senderista, que se lo encontró llorando en la zona de la Quinta de Ifonche. Este lo llevó ante la Guardia Civil, donde contó lo ocurrido a los agentes.
La familia, que vive en Alemania, se encontraba en Tenerife visitando al padre, que reside en Adeje. Este, que no tenía antecedentes ni denuncias previas, fue arrestado en su casa por un presunto caso de violencia machista y se negó a decir dónde estaban su mujer e hijo.
Mientras, un dispositivo conjunto de la Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local y Bomberos peinaba la zona con dos helicópteros buscando a ambos desaparecidos, que finalmente han aparecido muertos.
Todos los implicados actuaron a sabiendas de la edad
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