La Policía danesa ha informado de que han encontrado una sierra que podría ser la que usó el inventor, Peter Madsen, para descuartizar a la periodista sueca Kim Wall, de cuyo cuerpo se han encontrado varios fragmentos en las últimas semanas. Wall desapareció el 10 de agosto tras haber entrevistado a Madsen en el UC3 Nautilus, el submarino construido por el inventor.

Los buzos encontraron la sierra en la bahía de Køge (sur de Copenhague), en la ruta que la policía cree que Madsen siguió por el Báltico después de haberla matado. "Los técnicos criminalistas analizarán la sierra para averiguar si es la que la policía buscaba en el caso del submarino", ha señalado en un comunicado el jefe de la investigación, Jens Møller Jensen.

El submarino Nautilus en el que viajaban la periodista sueca Kimm Wall y el inventor danés Peter Madsen

El hallazgo se produce días después de encontrar en la zona una bolsa con la ropa de Wall y un cuchillo, otra con la cabeza, y las piernas, con trozos de metal añadidos para aumentar el peso. Aunque todavía no se ha difundido el resultado de la autopsia con los nuevos fragmentos, faltan los brazos, ni se ha establecido la causa de la muerte, se sabe que el cráneo no tenía fractura ni signo de violencia, con lo que se desacreditaría la explicación de Madsen.

Jorge Jiménez, sobre el crimen de Kim Wall: "Hay heridas creadas para hacer que el torso no suba a la superficie"

El inventor, en prisión preventiva por homicidio y trato indecente a un cadáver, sostiene que Wall, cuyo torso apareció flotando en el Báltico a finales de agosto, falleció en el interior de la nave al caerle de forma accidental la escotilla. Madsen asegura que navegó horas sin rumbo y pensando en el suicidio, aunque también tuvo tiempo de echar una siesta, antes de arrojar el cadáver por la borda, entero y con ropa.

La investigación policial ha concluido, sin embargo, que el cuerpo fue cortado de forma intencionada, que el torso llevaba tubos de metal fijados y que presentaba heridas para extraer el aire de su interior para que se hundiese y no saliera a la superficie. El inventor y la periodista estuvieron desaparecidos varias horas hasta que Madsen fue visto de nuevo el 11 de agosto por la mañana en la bahía de Køge, donde fue rescatado antes de hundirse la nave.

La periodista sueca Kim Wall

Madsen sostuvo inicialmente haber desembarcado a la reportera unas horas después del inicio del viaje y que la nave zozobró por un fallo, aunque luego cambió su declaración y se supo que el hundimiento del submarino fue intencionado. En la última vista ante los tribunales la fiscalía reveló que el torso de Wall presentaba 14 puñaladas en la zona del abdomen y que en el ordenador del inventor había vídeos de mujeres ejecutadas y torturadas, que él asegura que no son suyos.