Los montes arrasados pueden volver a ser lo que eran, es lo que ha ocurrido con el incendio de Solsonès de 1998 donde se calcinaron 30.000 hectáreas de bosque. Ahora, 19 años después, está regenerando pero con una sustitución de especies.
Más reciente es el incendio de 2004 en Minas de Riotinto, Huelva, allí dos personas murieron y se calcinaron casi 29.000 hectáreas, 13 años después se ve a la perfección dónde llegó el fuego y donde no. Pinos sueltos frente a masa forestal.
Juan Jesús Bermejo, alcalde de Berrocal, explica que "hay una zona totalmente arrasada donde no hay arboleda y lo que se ve verde son madroños y matorral mediterráneo".
Si pinos con 50 años se quemasen, se necesitaría el mismo tiempo en volver a ser lo que era.