El pasado 23 de marzo, la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC) dio luz verde la fusión de CaixaBank y Bankia. Y este cambio implica una serie de modificaciones en los clientes del banco absorbido en diferentes apartados: desde la cuenta bancaria a las comisiones.

En este sentido, desde Bankia insisten a sus clientes que la fusión no implicará un perjuicio para sus ingresos, pero la realidad es que el funcionamiento hará que la actividad de algunos de estos clientes se vea alterada. Por ejemplo, el banco ya ha explicado que llevará a cabo "un proceso de análisis para la racionalización de la red de sucursales". Es decir, podrían producirse solapamientos entre unas oficinas y otras, por lo que la sucursal habitual a la que vas podría cambiar. Repasamos todas las novedades:

Tarjetas, depósitos e hipotecas

En cuanto a las tarjetas de crédito, cabe recordar que ambas entidades bancarias llevarán a cabo un proceso tecnológico que unifique las gestiones de todas sus sucursales. No obstante, este cambio no se producirá hasta finales de este año y, tal y como indican desde Bankia, este proceso no afectará al uso actual de la cuenta: "Las tarjetas seguirán estando totalmente operativas y bajo las mismas condiciones que se tengan hasta ahora. En caso de que la entidad resultante las modificase, como consecuencia de una decisión de política comercial, informaría a sus titulares de las nuevas condiciones", escribe la entidad.

Con respecto a los depósitos e hipotecas, se mantendrán con las condiciones que estén pactadas en los contratos hasta su vencimiento.

Comisiones

"La entidad resultante será la que tendrá que fijar su política comercial. En todo caso, las modificaciones que se produzcan en base a esta política se comunicarían al cliente con antelación suficiente a su entrada en vigor". Esto es lo que indica el banco sobre la posibilidad de cobrar nuevas comisiones por la fusión, por lo que no se indica hasta qué punto el cliente tenga que pagar algo más.

No obstante, Bankia sí recalca en un punto, y es que los cajeros automáticos no implicarán ninguna comisión. Ahora bien, el caso de esta entidad era particular, debido a que tenía acuerdos con diferentes compañías para que sus clientes sacaran dinero del cajero sin una comisión adicional, algo que no ocurre en CaixaBank. Sin embargo, como consecuencia del cierre de algunos cajeros de Bankia, que mencionábamos anteriormente, se seguirá dando acceso a los clientes de estas entidades al cajero de Caixabank más próximo al de la entidad sustituida.

Cambios en el número de cuenta

Bankia ha confirmado que este es uno de los principales efectos de la integración. De este modo, desaparecerá el código IBAN correspondiente a Bankia y cambiará el número de cuenta del cliente. "Cuando esto se produzca, la entidad informará al cliente y éste no tendrá que hacer ninguna gestión sobre el resto de los productos vinculados a la cuenta, como las tarjetas y las domiciliaciones de ingresos o pagos", matiza la compañía.

Junto con eso, tanto Bankia como CaixaBank han insistido en que no habrá más cambios en otro tipo de cuestiones, como en los préstamos personales, los planes de pensiones o los seguros.