Este miércoles ha comenzado en la Audiencia Provincial de Málaga el juicio contra el hombre acusado de asesinar y decapitar a su expareja, Natalia, una auxiliar de enfermería de 46 años. El acusado, un hombre de 45 años, se enfrenta a una petición de 25 años de prisión por un delito de asesinato y nueve meses adicionales por quebrantar la orden de alejamiento que pesaba sobre él.

Natalia había denunciado a su expareja por violencia machista un mes antes del crimen. Según la acusación, el hombre la engañó con la excusa de devolverle dinero y la llevó a una playa de Marbella, donde la asfixió por sorpresa tras mantener relaciones sexuales, para luego decapitarla, cortarle las manos y realizar una incisión en su abdomen con el fin de que el cuerpo no pudiera ser identificado. A pesar de sus esfuerzos, el cadáver fue hallado el 8 de enero de 2023.

El acusado ha reconocido durante el juicio que cometió el crimen en un "impulso momentáneo" y se ha mostrado arrepentido. Sin embargo, la fiscalía sostiene que el homicidio fue deliberado, destacando la agravante de parentesco, y subraya la brutalidad con la que se ejecutó el asesinato. La acusación particular, por su parte, pide una condena de 26 años de prisión.

Los restos de Natalia fueron descubiertos en la playa entre Elviria y Las Chapas, en Marbella, tras lo cual su familia la identificó a través de imágenes compartidas en redes sociales. Desde entonces, han clamado justicia por el atroz asesinato de la madre de dos hijos que residen en Colombia.

El juicio, que cuenta con la participación de un jurado, continuará en los próximos días mientras se espera el veredicto final.