Los agentes de la Policía Nacional, junto a investigadores de la oficina del FBI en Madrid y Florida, apoyados por Guías Caninos y GEO, han continuado este jueves las labores de búsqueda de vestigios y pruebas que permitan la localización de Ana María Knezevich Henao. La investigación sigue abierta con múltiples líneas que apuntan a distintos escenarios, según ha podido saber laSexta.

Los agentes del FBI llegaron a España para colaborar en la búsqueda de la mujer colombo-estadounidense desaparecida el pasado 2 de febrero en Madrid, tras la detención hace unas semanas de su marido por su supuesta relación con los hechos. Los siete agentes del FBI, cuatro hombres y tres mujeres, que llevan la investigación del caso junto a agentes de la Policía Nacional, buscan el cadáver de la empresaria, ya que barajan como principal hipótesis que su marido recorrió varios miles de kilómetros en coche para matarla y luego se deshizo de su cuerpo en entorno de la R-2.

La búsqueda del cuerpo de Ana María, nacida en Colombia hace 41 años y con ciudadanía estadounidense, se está llevando a cabo esta semana, de acuerdo con una orden emitida por la jueza Inés Malagón, responsable de la investigación en España. También ha permitido que los agentes estadounidenses utilicen su propio equipo técnico "para la localización de torres de datos y cobertura móvil".

La búsqueda se centra en la localidad soriana de Esteras de Medinaceli, con siete agentes del FBI personándose en un ratio muy concreto y de difícil acceso. Este viernes se continuarán las labores de búsqueda, pero sin contar con los equipos de búsqueda estadounidenses.

En ese punto, las cámaras de tráfico captaron el coche en el que estaba la expareja de Ana María circulando por la A2 en dirección Guadalajara. Los investigadores creen que podría haberse desecho del cuerpo en el río Jalón, a unos 150 kilómetros de Madrid. Ana María avisó a sus amigas de que pasaría unos días en una casa de recreo a unas dos horas de Madrid.

El marido de la desaparecida, David Knezevich, de nacionalidad serbia, fue detenido el pasado 4 de mayo en el aeropuerto internacional de Miami (EEUU) por su presunta relación con el caso, gracias a la investigación llevada a cabo durante dos meses por la Policía Nacional, en colaboración con la Agregaduría de Interior de Belgrado, el FBI de Florida, y la Policía de Colombia.

Durante esas pesquisas, la investigación siempre se centró en el marido, del que Ana María se estaba separando. El proceso de divorció había comenzado meses antes y se había tornado en "muy duro y complicado", hasta el punto de "pedir ayuda médica por depresión", según el presidente de SOS Desaparecidos y portavoz de la familia, Joaquín Amills.