Sábado de nieves que no anticipa un domingo de bienes. Pese a remitir su intensidad con el paso de las horas, la borrasca Filomena mantiene en alerta a varios territorios de la Península.
A primera hora de este domingo, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) mantiene el nivel rojo por nevadas en Tarragona y Teruel, con avisos naranjas en el norte de la Comunidad Valenciana y de Cataluña.
Se esperaba que el temporal descargase con toda su intensidad este sábado y así fue, con nevadas que no cesaron desde primera hora de la mañana hasta bien entrada la noche, especialmente en Madrid, donde el Gobierno regional decidió suspender las clases del lunes y del martes dada la evolución de Filomena.
Misma decisión que en Castilla-La Mancha, cuyos centros educativos estarán cerrados, al menos, hasta el miércoles. La peor parte de este temporal se la han llevado por el momento los miles de ciudadanos que se vieron atrapados en sus vehículos desde este viernes.
La UME, junto con las autoridades de emergencias regionales, han sido los encargados de llevar a cabo las labores de rescate de los miles de vehículos que pasaron largas horas atrapados en la nieve.
Después de la nieve, el frío
Barajas también sufrió las inclemencias del tiempo. A primera hora de este sábado, se anunció que se suspendía el servicio hasta las 23:00 horas, decisión que se amplió hasta, al menos, la tarde de este domingo. Es decir, ningún vuelo puede salir de Madrid y ningún vuelo pueden entrar en la capital. También fueron suspendidas todas las comunicaciones ferroviarias con la comunidad autónoma.
Se puede decir que la situación, pese a que sigue siendo de alerta general, ha mejorado con respecto a este sábado. Se espera que este domingo implique la transición entre las intensas precipitaciones y el frío gélido de la borrasca, que amenaza con temperaturas récord a la baja.
Es por eso que las autoridades han avisado a los ciudadanos de que deben limitar sus desplazamientos al máximo. El ministro Grande-Marlaska pidió ante los medios que sólo se viaje "si es inevitable", lanzando un mensaje claro por parte del Gobierno: debemos quedarnos en casa.
Y es que tras la tormenta, llega el frío, concretamente la primera ola de frío del año. Desde el lunes 11 de enero hasta el jueves 14 inclusive, se prevé registrar temperaturas de cinco a 15 grados por debajo de lo habitual, según la AEMET.
En Madrid se cree que se podrían alcanzar los 12 grados bajo cero, lo que provocaría un récord absoluto en la historia de la comunidad, mientras que Zaragoza puede vivir su nevada más importante del siglo. Especialmente duras serán las temperaturas durante la noche, superando de forma muy limitada los 0ºC.