La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado una investigación, gracias a la colaboración ciudadana, que se ha saldado con la identificación, localización e investigación del conductor de un turismo, al que se le ha instruido diligencia como presunto autor de delito contra la seguridad vial, por conducir de forma manifiestamente temeraria.

El ahora investigado condujo por la autoría RM-2, que une Alhama de Murcia con la autovía A-30, con un menor de corta edad en su regazo, poniendo con ello en grave riesgo la vida del menor. Las actuaciones se iniciaron el pasado mes de julio, cuando, gracias a la colaboración ciudadana, la Guardia Civil fue alertada de la circulación de un turismo por la autovía RM-2, en el que su conductor llevaba en su regazo a un menor de corta edad.

Efectivos de la Agrupación de Tráfico de la Benemérita recibieron un vídeo en el que se apreciaba este tipo de conducción temeraria e iniciaron la correspondiente investigación para esclarecer los hechos y tratar de identificar a su autor. Los guardias civiles del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT) de la Unidad de Investigación de Seguridad Vial del Sector de Tráfico de Murcia analizaron exhaustivamente las imágenes aportadas por los ciudadanos y constataron que se trataba de un vehículo, tipo turismo, de color blanco, circulando por autovía.

En su recorrido se visualiza en el interior del habitáculo delantero a un menor de edad ocupando la posición del conductor, sentado sobre el regazo de un adulto y cogiendo ambos con sus manos el volante, una conducción considerada de grave imprudencia y que genera un considerable peligro para la integridad física de un menor de corta edad.

Fruto de la investigación, los guardias civiles identificaron al conductor del vehículo y presunto autor de los hechos, que ha sido localizado y se le ha instruido diligencias por un delito contra la seguridad vial, por conducir de forma manifiestamente temeraria.

Como en este caso, la Guardia Civil agradece la colaboración ciudadana, sin la cual algunas de estas conductas quedarían impunes y apela a los ciudadanos a que cuando presencien cualquier tipo de conducción anómala avisen, tan pronto como sea posible, al teléfono de emergencias 062 de la Guardia Civil.