Este lunes, un hombre murió en el incendio de su vivienda en Badalona. Según confirman fuentes jurídicas a laSexta, esta persona se encontraba investigada en un procedimiento por la muerte violenta de otra persona, en una causa que se instruye en el juzgado de instrucción 4 de Badalona y que está declarada secreta.

Sus vecinos hablan abiertamente de lo molesta que era la convivencia con esta persona, que amenazaba con "incendiar" el bloque. Llegan a asegurar que el incendio lo tenía planeado y que intentó agredir a uno de los vecinos, que se oculta por miedo.

Los gritos, los insultos y las amenazas formaban parte del día a día. Hace dos meses, alguien pintó la palabra 'asesino' en la fachada del edificio porque el hombre era el principal sospechoso por la desaparición y muerte de Joan Pere Madurell, un vecino de Vic de 44 años.

El propio hombre fallecido no ocultaba su vinculación con el caso. "Decía: 'Ya me cargué una cabeza, me puedo cargar más cabezas'", cuenta un vecino. Joan Pere envió un mensaje a un amigo del trabajo avisándole de que no iría a trabajar y un vídeo a su novia donde aparecía el hombre. Su cabeza fue encontrada cerca de un hospital y su tronco, una semana después en el barrio de Gràcia de Barcelona.