El camión, de gran tamaño, se encontraba en el aparcamiento de un local comercial Walmart del suroeste de la ciudad estadounidense. Uno de los empleados del local fue el responsable de dar la voz de alarma. Otras ocho personas que se encontraban en el camión han sido atendidas 'in situ' y sus vidas no corren peligro.
La veintena de asfixiados han sido inmediatamente hospitalizados y uno de ellos ha perdido la vida en el centro hospitalario. El estado de algunos de ellos es crítico, según el primer balance del departamento de Bomberos de San Antonio.