Ocho miembros de una familia, entre los que había cinco menores, han sido encontrados muertos a tiros dentro de una vivienda en la comunidad agrícola de Enoch, en el estado norteamericano de Utah, según han informado las autoridades locales.

De acuerdo con las últimas informaciones, fue el padre quien asesinó al resto de su familia. Su mujer había presentado una demanda de divorcio justo antes de las Navidades y, en respuesta, mató a tiros a sus hijos (de entre 4 y 17 años), a su esposa, su suegra y después se quitó la vida.

Los oficiales de policía descubrieron el crimen el miércoles al realizar un control de los servicios sociales en la vivienda, localizada en esa ciudad donde residen unas 8.000 personas, al suroeste de Salt Lake City, de acuerdo con medios locales.

"Los Haight [la familia asesinada] eran mis vecinos. Sus hijos pequeños jugaban en mi jardín con los míos", ha dicho el alcalde Geoffrey Chesnut en declaraciones a los periodistas. "Enoch es una ciudad con una comunidad muy cercana, los vecinos son buenos, la gente es maravillosa. Y el esfuerzo que hacemos los unos por los otros es como el de una familia", ha insistido.

El director administrativo de la ciudad, Rob Dotson, ha explicado que normalmente se realiza una verificación por parte de los servicios sociales en un hogar cuando otros vecinos plantean inquietudes o no han visto a algún residente durante un período de tiempo inusual, pero no ha proporcionado más detalles sobre la situación de esta familia.

"Esta comunidad siente remordimiento, siente dolor", ha dicho Dotson. "Hay amigos, vecinos y familiares que están sufriendo por este incidente", ha precisado.

Por otra parte, el distrito escolar de Iron, en Enoch, ha publicado un comunicado en el que informaba de la tragedia en la que fallecieron cinco estudiantes.

Según explican medios estadounidenses, los vecinos de esta comunidad rural están muy unidos y las casas rara vez cambian de propietarios, lo que garantiza que casi todos los ciudadanos se conozcan.

Aaron Diamond, un residente de Enoch City, ha apuntado al New York Times que conocía bien a los fallecidos porque asistían a la misma iglesia que él.

"Eran una familia maravillosa, maravillosa", dijo, y agregó que el padre había trabajado para una compañía de seguros. "Todos estamos conmocionados y desconsolados", dijo Diamond. "La gente que vive aquí ama a sus vecinos". "Nuestros corazones están con todos los afectados por esta violencia sin sentido. Por favor incluyan a la comunidad de Enoch en sus oraciones", dijo por su parte en Twitter el gobernador del estado, Spencer J. Cox.